Como máxima autoridad ambiental en el departamento, Corpoguajira, adelantará en el área de su jurisdicción importantes acciones con el objetivo de identificar oportunidades de negocio para la reconversión laboral de los captores, intermediarios y comerciantes que hacen parte de la cadena de tráfico ilegal de la tortuga marina, como estrategia para la preservación de la especie, que permita el fomento de la cultura de emprendimiento, la generación de empleo sostenible y el fortalecimiento empresarial de los vendedores de tortuga marina en el municipio de Riohacha.
En La Guajira, hacen presencia cuatro de las siete especies de tortugas marinas que podemos encontrar en Colombia, Verde (Chelonya midas), Gogo (Caretta caretta), Tortuga Carey (Eretmochelys imbricata) y Tortuga Canal (Dermochelys coreacea), especies en peligro de extinción según la UICN CITES y la resolución 383 de Febrero 23 de 2010 del Ministerio de Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorial, por la cual se declaran las especies silvestres que se encuentran amenazadas en el territorio nacional.
“Durante décadas, la pesca de tortugas marinas y la comercialización de su carne y sus derivados en la península, ha constituido una actividad ancestral para un núcleo importante de indígenas wayúu y otros habitantes de la zona que han acogido éstas actividades como fuente alterna de sustento en ciertas épocas del año”, manifestó Arcesio Romero Pérez, Director General de Corpoguajira, quien además explicó que actualmente en Riohacha, se captura una cifra aproximada de 729 tortugas al año. La cadena productiva en esta sección de La Guajira, genera ingresos por cerca de $765´116.759, producto no solo de la comercialización de las tortugas capturadas en Riohacha, sino también de las que ingresan a la cadena procedentes de la Alta Guajira.
La problemática socioeconómica que afrontan los habitantes de esta zona como bajo poder adquisitivo, pocas oportunidades laborales, nivel de vida precario y factores culturales arraigados, explican la necesidad y dependencia que tienen estos grupos de desarrollar este negocio que genera externalidades negativas en el ecosistema y el bienestar social.
Desde hace varios años, Corpoguajira ha desarrollado programas basados en actividades de monitoreo, seguimiento y evaluación de la comercialización de esta especie para reducir su tráfico ilegal, sin embargo la captura ilegal por parte de los pobladores locales continúa impactando sobre la oferta natural porque tanto las autoridades ambientales, como los organismos de seguridad, desconocen los sistemas utilizados por los pescadores, traficantes y comercializadores para llevar el producto hasta la mesa de los guajiros. Este factor, sumado a la diversidad y accidentalidad del departamento de La Guajira, ha influido para que el comercio ilegal de la especie tenga amplia participación de la población nativa y de los habitantes de las zonas costeras.
El lanzamiento de éste proyecto se socializará mañana 22 de septiembre de 2011, a partir de las 4:00 pm, en el auditorio de la Corporación. Entre las actividades que se desarrollarán como parte de la estrategia se destacan:
Realizar procesos de difusión que permitan incentivar la participación del público objetivo en el programa de reconversión laboral de los pescadores, intermediarios, comerciantes que hacen parte de la cadena del tráfico ilegal de las Tortugas Marinas.
Realizar la caracterización y diagnóstico socio-económico a los diferentes actores que hacen parte de la cadena de tráfico ilegal de la tortuga marina, en el municipio de Riohacha.
Desarrollar talleres sobre modelos mentales de emprendimiento, liderazgo, trabajo en equipo, socialización de las leyes y normas sobre tráfico ilegal de fauna silvestre y la aplicación de la ley sancionatoria ambiental.
Formular y estructurar los planes de negocios en los actores involucrados.
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