El 12 de octubre de 2014, se celebrará el Día del Árbol, para conmemorar esta importante fecha ambiental, la Corporación Autónoma Regional de La Guajira, lidera varias jornadas de reforestación y aseo en Riohacha, Manaure, Camarones y Hatonuevo.

Las actividades iniciaron el día de hoy y se extenderán hasta el próximo lunes 14 de octubre del presente año. Los árboles, frutales y nativos, serán sembrados, por líderes ambientales y comunales, con el fin de apoyar la estrategia nacional de mitigación de la huella de carbono y para atenuar en ésta zona del país los efectos del calentamiento global.

La celebración del día del árbol fue instituida en 1969 por el Congreso Forestal Mundial, en Roma. En ésta fecha se busca resaltar la importancia de los árboles en la vida del planeta tierra, de los ecosistemas, la flora, la fauna y los seres humanos.

Siete razones para sembrar árboles:

1. Los árboles disminuyen la contaminación: Las hojas de los árboles retienen las partículas de polvo que flotan en el aire, evitando que las inhalemos al respirar.

2. Oxigenan el aire: Las hojas fijan el CO2 atmosférico, el cual es un producto residual del metabolismo humano y animal y de la quema de combustibles, además de producir grandes cantidades de oxígeno.

3. Refrescan el ambiente: Las plantas, además de la fotosíntesis, desarrollan otros procesos como la evapotranspiración. Las hojas liberan vapor de agua que refresca el aire y lo humedece. Plantar árboles alrededor de las casas puede refrescarlas entre un 10% y 50%. De esta manera disminuye el uso de los sistemas de refrigeración que también contaminan el ambiente.

4. Reducen la contaminación sonora: Las grandes masas de hojas funcionan como amortiguadores del ruido generado por el tránsito, las industrias y el funcionamiento de la ciudad.

5. Son pequeños ecosistemas: Cada árbol funciona como un verdadero ecosistema, sobre él viven aves e insectos.

6. Intervienen en el ciclo del agua: Las raíces retienen el agua de lluvia, permitiendo que ésta se filtre lentamente a través del suelo hasta los acuíferos y que se dirija despacio hasta los ríos, manteniendo estable el caudal y evitando sequías e inundaciones.

7. Protegen el suelo: Evitan la erosión y el desgaste de los suelos, sosteniendo las partículas del suelo con sus raíces.